La implementación de la Maestría Profesional en Medicina estuvo motivada por la necesidad de mejorar la formación de los médicos residentes, con el fin de atender las demandas del mercado laboral actual de profesionales con capacidad para analizar críticamente la producción científica y tecnológica de su área, conocimiento de las políticas públicas de salud y autonomía en la gestión de su desempeño profesional. En resumen, su objetivo general es desarrollar habilidades y competencias que permitan a los médicos modificar y mejorar las prácticas de salud. Los profesores cuentan con una sólida formación técnico-científica, asociada a la práctica asistencial, con experiencia en la organización de servicios, establecimiento de protocolos clínicos y desarrollo de nuevas tecnologías en salud.