Mir

MIR

Movimiento de Izquierda Revolucionaria, organización política chilena

Por Rodrigo Nobile

La organización política MIR se fundó el 15 de agosto de 1965, a partir de la confluencia de movimientos de jóvenes iniciados en la Universidad de Concepción. Recibió una fuerte influencia de Fidel Castro y del pensamiento de Ernesto Che Guevara, criticaba el reformismo y proponía la recuperación de la teoría revolucionaria de corte marxista-leninista. Otra característica distintiva fue su latinoamericanismo, consolidado mediante una estrecha relación con la Revolución Cubana; con el apoyo al congreso de la Organización Latinoamericana de Solidaridad (OLAS), realizado en Cuba en agosto de 1967; y con la guerrilla que se desarrollaba en las selvas bolivianas liderada por Guevara.

Miguel Enríquez, líder del MIR (Biblioteca Nacional del Congreso de Chile)

 

Entre sus propuestas programáticas se encontraban la reversión del carácter monopolista y primario-exportador de la economía chilena y la ruptura con la condición de dependencia mediante la conquista del poder por parte de las clases obreras y campesinas. EL MIR se dedicó con empeño a formar células y a expandirse entre las masas. Así, rápidamente se diseminó por las clases trabajadoras de las grandes ciudades, al contar con el apoyo de publicaciones como la revista Punto Final –en la cual trabajaban muchos militantes– y, posteriormente, del periódico El Rebelde, publicación oficial del partido que circuló, incluso, en la clandestinidad. En esa primera etapa tuvo como líder a Miguel Enríquez Espinosa, quien asumió el cargo de secretario general en 1967.

En enero de 1968, el MIR conquistó el apoyo interno de otros grupos revolucionarios como el Grupo Avanzado Marxista de Concepción (GRAMA) y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Santiago (FAR). En 1969, la orientación se modificó al buscar actuar en dos frentes: la acción armada y de politización junto a las masas. Para ello, se constituyeron grupos político-militares y también frentes de masa: el Frente de Trabajadores Revolucionarios (FTR), el Movimiento Campesino Revolucionario (MCR) y el Frente de Estudiantes Revolucionarios (FER), entre otros.

El MIR apoyó la campaña de Salvador Allende a la presidencia, criticando sin embargo las limitaciones de la vía pacífica al socialismo. Durante el gobierno de la Unidad Popular mantuvo su autonomía y denunció el carácter reformista del gobierno, las concesiones al capital y la alianza con la burguesía. Durante esa etapa lideró especialmente movimientos de campesinos y de estudiantes, y se expandió por todo el país.

Evaluando el riesgo de un golpe, los militantes del MIR lo denunciaban sistemáticamente e incitaban a la preparación del pueblo para el conflicto armado. En el episodio del bombardeo al Palacio La Moneda, Miguel Enríquez propuso a Allende rescatarlo y llevarlo a un barrio popular, desde donde comandaría la lucha antigolpista, pero el presidente prefirió resistir en el palacio.

A partir del golpe, el MIR dio continuidad a su trabajo de masas en la clandestinidad y, al mismo tiempo, desarrolló la resistencia armada. Sus principales acciones, durante ese período, tenían como objetivo organizar y desarrollar el movimiento de resistencia popular, restituir las libertades democráticas y el respeto a los derechos humanos, defender el nivel de vida de las masas, derribar la dictadura de Augusto Pinochet y establecer un nuevo gobierno.

Debido a la radicalidad de sus acciones y proposiciones, los integrantes del MIR se convirtieron en las primeras víctimas de las persecuciones del régimen militar y especialmente del órgano de inteligencia de la dictadura, la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA). En el ámbito de la lucha armada, el MIR ejecutó varias ofensivas contra personalidades e instalaciones vinculadas a la dictadura, pero vio a la mayor parte de su militancia encarcelada, torturada, exiliada, asesinada o “desaparecida”. Miguel Enríquez, entonces secretario, fue asesinado en combate el día 5 de octubre de 1974. Andrés Pascal Allende, sobrino del ex presidente, asumió el puesto, pero debió exiliarse en 1975.

Así, la represión fue minando el movimiento que, en 1986, sufrió una fuerte crisis con la formación de una disidencia surgida en virtud de divergencias sobre la forma de acción. Muchos militantes dejaron el grupo, otros renunciaron a la lucha política, o incluso crearon nuevas facciones como el MIR-Militar, el MIR-Social y el MIR-Renovación.

Conteúdo atualizado em 20/05/2017 15:35